“7 de Oro”, un insecto que genera preocupación en el campo

El campo está en alerta desde hace algunas semanas. Todo por el contagio y muerte de bovinos. Se le apunta a un insecto y desde el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) Bragado dieron detalles sobre la situación.

En su visita de hoy a El Megáfono, el ingeniero agrónomo David Melión hizo foco en el escarabajo conocido como “7 de Oro” (Astylus atromaculatus): “Empezó a notarse esto durante diciembre y todo enero, que son los momentos donde el insecto tiene la mayor actividad”.

Según precisó, se alimenta de polen de maíz y sorgo para llevar adelante su ciclo de vida adulto, pero se trasladó a otros cultivos por las complicaciones para implantarlos de manera temprana por la sequía, cuando no encontró esos hospedantes tradicionales.

Este insecto, como indicó, “está todo el otoño y el invierno en el suelo, como una larva”, y el clima seco es “una de las causantes de la gran cantidad” que se observa.

Además, remarcó que “no está reportado que cause daños reales sobre cultivos agrícolas”. “Normalmente no preocupa. Al revés: es un insecto que con su actividad de polinización que va realizando hasta podría considerarse un benéfico”, amplió.

Otro de los puntos que tocó fue la alfalfa, cultivo forrajero que llegó a floración, de asoció el pastoreo con la alta carga de insectos que “genera problemas digestivos en los animales y causó, en algunos casos, la muerte”. “Entonces, eso ya generó una preocupación adicional, no solo en la hacienda bovina sino también en equinos y ahora hay algunos reportes en ovinos”, sumó.

Este, de acuerdo a lo manifestado, “no es un insecto difícil de controlar”, pero aclaró que “la plaga es muy móvil”.

Lluvias y cosecha

Por otra parte, expresó que en febrero-marzo-abril está pronosticada “una disminución del efecto de la Niña y una neutralidad creciente”, mientras que en septiembre-octubre-noviembre se puede dar “una reversión total del fenómeno”.

“Lamentablemente, la cosecha que pasó de fina ya tuvo su impacto, absolutamente declarado. Y esta cosecha tiene un impacto que ya se ve reflejado en las superficies implantadas de cada cultivo”, precisó.